En fin, estoy sorprendida porque TENGO APETITO.
SE ME ANTOJA COMER, me gusta, lo disfruto, y como de todo: carnes, pan, quesos. Postres de chocolate.
No quiero pesarme, a veces empiezo a comer y ya no tengo control, quiero más y más, aparte, L disfruta la "buena mesa", siempre son comidas copiosas, completas, platillos lindos.
¡¡¡ Qué irónico, yo sufro cada bocado, detesto la sal, el azúcar, la carne, odio mi debilidad frente a la comida... mientras que el sueño de mi novio es abrir un restaurante !!!
Quiero acompañarlo en ello, pero mis hábitos y el espejo siempre están recordándome otra cosa. Sin ejercicio y sin parar de comer me siento horrenda. Realmente horrible, me da vergüenza escribirlo y aceptarlo públicamente.
Por otro lado, me siento mejor...(ohhhh voy a enloquecer)Si, es cierto, pero debo ACEPTAR QUE ME GUSTA COMER, DEJARMELO CLARO. ACEPTARLO. Ya no me siento ni taaan triste.
Estaré una semana más en París, caminando, acariciando esta ciudad fabulosa, comiendo, probando cosas nuevas... ME SIENTO TAN LLENA DE ENERGÍA.
Leí algo bellísim0, que me repito cada vez que empiezo a sabotearme antes, durante o depués de comer:
MI PESO ES EL AMOR QUE SIENTO POR MÍ
Esto es, no más. Vida sólo hay una. Dejo una de mis fotos de París.
Suerte y un abrazo a quien leyere.